Este jueves 18 de septiembre trabajadores del Hospital General “Dr. Alberto Vargas Merino”, festejaron el vigésimo octavo aniversario del nosocomio.
Lamentablemente en este 2025, no hay mucho que festejar debido a que la unidad médica está a punto de colapso, debido en cierta parte a la transición al IMSS-BIENESTAR y por otra, al mal desempeño del personal que labora en el referido nosocomio.
Un caso reciente que causó molestia y consternación fue el de un paciente masculino de 63 años, quién el pasado 11 de septiembre acudió a la unidad médica solicitando atención, desafortunadamente, al no contar con el personal médico, material para los estudios pertinentes, tampoco Rayos X, el paciente solicitó su alta voluntaria el día14, pues su condición económica no es suficiente para acudir al sector privado, ni para trasladarse a otro hospital.
Debido a su estado de salud, nuevamente acudió al hospital el día 15 del presente, con la esperanza de ser atendido, pero se encontró con la misma cantaleta de siempre, máxime que de manera escalonada según oficio girado por la Secretaría General de la Sección 35, habría descansos escalonados, ocasionando que hospital se quedara sin anestesiólogo, impidiendo que el paciente pudiera ser operado encontrándose en estado crítico de salud.
No fue hasta el próximo día (16 de septiembre) que el adulto mayor fue intervenido, pero debido al tiempo transcurrido, esto le ocasionó un choque séptico qué a la postre, le ocasionara la muerte, generando molestia e impotencia en los familiares.
Y así, podemos enumerar muchos casos de negligencia médica ocurridos en el Hospital Dr. Alberto Vargas Merino que no son denunciados, sobre todo, porqué el abuso cometido es contra personas de la Sierra Cuicateca, adultos mayores y/o personas de escasos recursos que también son amenazados y, que estos actos de abuso parecieran solapados por autoridades afines al partido oficial, pues posan gustosos para la foto en lugar de “aprovechar su amistad” con gobernantes para mejorar la calidad del servicio.
Pero la salud de la ciudadanía es lo que menos les importa (claro, salvo algunas excepciones), lo que más interesa es la fiesta, los eventos deportivos y la convivencia en conocido salón para fiestas, ¿Por qué le digo esto? Pues porqué en grupos de WhatsApp solicitaban a los trabajadores hacer la “cooperacha” para cubrir el costo de los eventos, y, cooperar no es malo, lo malo sería que hoy 18 de septiembre a alguien se le ocurra enfermarse.
So pretexto del festejo el hospital se encuentra prácticamente desolado, pero esto prácticamente ocurre todos los días de la semana, pues los médicos especialistas laboran cuándo quieren, en el horario que se les antoja y si no me cree, entonces por qué ya no hay consultas a la 1 de la tarde.
Todo esto sucede, bajo la complacencia del “encargado del Hospital”, Enf. Juan Fernando Cambero García, quién para no tener problemas con “la base”, autoriza todos los permisos, pases de salida o simplemente no dice nada si alguien le avisa, que no irá a trabajar.
A pesar de que hace un mes, la Diputada Local Lizbeth Concha Ojeda realizó un exhorto al Congreso de Oaxaca para que pusiera especial atención a lo que ocurre en este hospital, hasta ahora, no hay, no existe un punto de acuerdo para solicitarle a los Servicios de Salud designar un Director y corregir todas las anomalías existentes.
Y es por esto que la pregunta obligada es ¿Habrá o existirá calidad moral al preocuparse más por realizar una celebración a pesar de que en la semana del 28 aniversario han fallecido dos personas en el nosocomio?, sea usted el mejor juez.